Tenias: Cestoda

El cuerpo de la mayoría de las tenias es plano y mucho más largo que ancho, por lo que parece una cinta o cinta. La longitud varía de 0,02 pulgadas (0,6 milímetros) a 98 pies (30 metros), los gusanos más largos se encuentran en los cachalotes. Las tenias son parásitos que no tienen cabeza, boca o sistema digestivo. Los parásitos (PAR-uh-sitios) son animales o plantas que viven en o dentro de otros animales o plantas, o hospedadores, sin ayudarlos y generalmente dañarlos. Las tenias tienen una cubierta corporal a través de la cual absorben los nutrientes del intestino del huésped. Esta cobertura también protege a los gusanos de las reacciones inmunitarias y los ácidos digestivos del huésped. Las tenias son blanquecinas y, como parásitos internos, viven en la oscuridad.

El cuerpo de las tenias tiene tres regiones: escólex (SKOH-leks), cuello y estrobila (stroh-BYE-luh). El scolex es la cabeza. Tiene espinas, ganchos, retoños, tentáculos, glándulas que liberan secreciones pegajosas, o una combinación de estas estructuras que el gusano utiliza para unirse a la pared interna del intestino del huésped final, también llamado huésped primario. Las ventosas son la herramienta de fijación más común. Los retoños generalmente tienen forma de copa y tienen paredes musculares poderosas. El cuello es la región del cuerpo justo detrás de la escólex. Suele ser corto.

La estrobila está detrás del cuello. Consiste en una fila de segmentos llamados proglótidos (proh-GLAH-tuhds). La estrobila se compone de entre unos pocos y más de mil proglótidos, pero generalmente contiene varias docenas. Cada proglótida comienza a desarrollarse en el cuello, y las proglótidas se forman una a una a lo largo de la vida de la tenia en el huésped final. Justo detrás del cuello, los proglótidos son cortos y estrechos. Cuando se forma un proglótido nuevo en el cuello, los proglótidos ya formados se empujan hacia atrás, crecen y eventualmente contienen los órganos reproductores.

Detrás de los nuevos proglótidos, cada strobila contiene los siguientes tipos de proglótidos, de adelante hacia atrás: proglótidos prematuros, con los inicios de los órganos reproductores; proglótidos maduros, que contienen órganos reproductores masculinos y femeninos en funcionamiento; proglótidos posmaduros, que contienen huevos en desarrollo; y proglótidos grávidos (GRA-vuhd), que contienen huevos maduros. Los proglótidos grávidos al final del gusano se rompen y pasan al medio ambiente con las heces del huésped (FEE-seez). Algunas especies de tenias no tienen proglótides.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.