Plásticos Biodegradables a Base de Acetato de Celulosa

Resumen

Generalmente se sabe que el acetato de celulosa secundario (con 53 a 56% de grupos acetilo) es adecuado para el procesamiento de termoplásticos. Con los plastificantes adecuados se obtiene un material plástico que sobresale en transparencia y textura agradable, y por lo tanto se usa a menudo para mangos de herramientas, peines, marcos de gafas y similares. En principio, el acetato de celulosa con tal grado de sustitución es biodegradable, aunque la degradación avanza muy lentamente. Sin embargo, cuando los plastificantes comunes se sustituyen por ésteres específicos y otros componentes de bajo peso molecular (al menos el 30% en peso), el «material plástico» tiene las mismas propiedades termoplásticas, pero se descompondrá en el suelo o el agua en pocos años. Por ejemplo, una taza de acetato de celulosa enterrada en lodos de depuradora perdió más del 70% de su peso original en aproximadamente 18 meses. En un ambiente acuoso (prueba de Sturm), la descomposición ascendió a más del 60%. En condiciones adecuadas de compostaje o de fermentación anaeróbica, es probable que el proceso de degradación sea aún más rápido. Sin embargo, el material también se puede reciclar o incinerar sin residuos. Este nuevo tipo de plásticos biodegradables se puede procesar en máquinas de moldeo por inyección convencionales o en extrusoras adaptadas a sus propiedades de procesamiento específicas. Se pueden convertir en materiales granulares, tiras y películas, y en formas moldeadas por inyección y moldeadas por extrusión y soplado. Las propiedades del material son comparables a las de los plásticos conocidos a base de éster de celulosa. Las películas y los cuerpos huecos de paredes delgadas son altamente transparentes. Las propiedades mecánicas se comparan bien con las de los materiales de embalaje convencionales. La resistencia térmica es algo menor, pero la permeabilidad al vapor y al oxígeno es relativamente alta en comparación con la de los plásticos estándar. El material es resistente a aceites y grasas y, por un corto tiempo, incluso a ácidos y álcalis débiles.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.