1. Colocar las zanahorias en una olla mediana y cubrir con agua. Llevar a ebullición a fuego medio. Continúe hirviendo hasta que las zanahorias estén muy tiernas, de 12 a 15 minutos. Drenar.
2. Transfiera las zanahorias escurridas a un tazón grande y triture hasta que estén muy suaves. Agregue las yemas de huevo, la sal y el queso parmesano. Agregue la harina y mezcle hasta que se incorpore.
3. En una superficie ligeramente enharinada, enrolle un tercio de la masa de zanahoria en un tronco de aproximadamente ¾ de pulgada de grosor. Corta el tronco en trozos de 1 pulgada. Transfiera los ñoquis terminados a una bandeja para hornear enharinada. Repetir con el resto de la masa.
4. Ponga a hervir una olla grande de agua con sal. Agregue los ñoquis y cocine hasta que floten en la superficie, de 3 a 4 minutos. Drenar.
5. En una sartén grande, derrita la mantequilla a fuego medio. Cocine hasta que la mantequilla comience a dorarse ligeramente y huela a nuez, de 8 a 10 minutos. Agregue el ajo y la salvia, y cocine hasta que estén fragantes, de 1 a 2 minutos.
6. Agregue los ñoquis escurridos a la sartén y saltee hasta que estén bien cubiertos con mantequilla, ajo y salvia. Sazonar con sal y pimienta negra recién molida, y decorar con queso parmesano. Servir inmediatamente.