Para llegar a sus hallazgos, Liu y su equipo analizaron datos de más de 3,5 millones de pacientes e identificaron 50.000 que informaron tener cálculos renales.

Encontraron que los pacientes con cálculos renales tenían un 19% más de probabilidades de experimentar un incidente de CC, definido como tener un ataque cardíaco o una cirugía de derivación arterial, y un 40% más de probabilidades de tener un accidente cerebrovascular, en comparación con los pacientes que no tenían cálculos renales.

«La gente debería preocuparse por los cálculos renales», dice Liu. «La evidencia sugiere una asociación entre cálculos renales y enfermedades cardiovasculares incidentales, incluso después de ajustar por otros factores de riesgo cardiovascular.»

Pero el equipo se sorprendió aún más al descubrir que las mujeres con cálculos renales tenían un riesgo mucho mayor de experimentar incidentes de CC que los hombres, en particular, ataques cardíacos. Según Liu, este hallazgo es «inesperado y difícil de explicar.»

Como tal, dice que se requieren más estudios para confirmar esta asociación y evaluar los mecanismos subyacentes.

Comentando los hallazgos del equipo, Thomas Manley, director de actividades científicas de la Fundación Nacional del Riñón, dice:

«Los cálculos renales son comunes, y con su asociación con la enfermedad coronaria y el accidente cerebrovascular encontrados en este estudio, sugiere que se debe considerar una evaluación cardiovascular exhaustiva en pacientes que desarrollan cálculos renales.»

Agrega que estos hallazgos también sugieren que las personas deben adoptar modificaciones en el estilo de vida que podrían reducir el riesgo de cálculos renales y problemas cardiovasculares, como pérdida de peso, una dieta saludable, dejar de fumar y hacer ejercicio.

El año pasado, Medical News Today informó sobre un estudio que afirma que las bebidas azucaradas aumentan el riesgo de cálculos renales.