La manzanilla es rica en ciertos aceites esenciales que son especialmente beneficiosos para el sistema digestivo. Su capacidad para aliviar el malestar digestivo, así como el estrés y la tensión subyacentes que tal vez sean la causa del problema, hacen de la manzanilla un remedio eficaz para el estrés y la digestión. La manzanilla actúa sobre los nervios y músculos secundarios y, por lo tanto, relaja indirectamente todo el cuerpo. Cuando el cuerpo físico está a gusto, la mente y el corazón le siguen.
La manzanilla alivia las paredes de los intestinos, alivia los dolores agudos e intensos repentinos y elimina los gases. Debido a que relaja y tonifica el sistema nervioso, es especialmente valioso cuando la ansiedad y la tensión producen síntomas digestivos, como gases, dolores cólicos o incluso úlceras. Sus cualidades ligeramente amargas ayudan a estimular la función hepática, aumentando la secreción de bilis, una sustancia que el cuerpo produce naturalmente que ayuda al proceso digestivo, ayudando a la eliminación de toxinas a través del hígado y a descomponer las grasas en el intestino delgado. Puede calmar la inflamación, como la gastritis, y ayudar a prevenir las úlceras.
Una taza de té caliente de manzanilla es una forma sencilla y eficaz de aliviar el malestar digestivo. Es mejor remojarlo y taparlo durante 10 a 15 minutos. ¡Esto garantiza que obtenga el mayor beneficio de su té!